De los cinco miedos capitales este es el miedo que genera una importante proyección en las personas. Este miedo ha inspirado a los poetas, escritores, pintores, dramaturgos, escultores; casi a todos aquellos personajes que nos han heredado su inspiración en sus obras y que prácticamente todos los seres humanos nos proyectamos en sus obras.
El canta autor mexicano José Alfredo Jiménez con un tono de macho, pero miedoso y casi llorando interpreta la melodía de su autoría “Cuatro caminos”, con gran fuerza, la melodía proyecta el miedo a perder a su amda, tan fuerte que hasta andando con otra por ella suspira.
Es imposible que yo te olvide
es imposible que yo me vaya
por donde quiera que voy te miro
ando con otra y por ti suspiro.
Es imposible que todo acabe
yo sin tus besos me arranco el alma
Si ando en mi juicio no estoy contento
Si ando borracho pa’ qué te cuento. . .
Sólo por mencionar un referencia artística de un cantante conocido por muchos que proyecta en su obra el miedo a la pérdida de un ser querido.
Este miedo no tiene límites. Abarca desde la perdida un ser amado, por que muere, hasta la pérdida por una mala relación personal.
El temor de perder a alguien amado es normal y común para la mayoría de nosotros. Este temor tiene su origen en el miedo a estar solo en el mundo y en el miedo a no ser capaz de soportar la idea de ser el que ha quedado atrás.
Pensar en la posibilidad de perder a alguien que amas es devastador, hiriente. Puede que hayas invertido buena parte de tu tiempo y tus sentimientos en esa persona, y la simple idea de perderla te sume en un estado de pánico.
Existen diferentes categorías de personas hacia quienes podemos sentir gran afecto. El temor de perder a cualquiera de estas personas puede ser traumático para un individuo, especialmente si él o ella ya ha experimentado una pérdida importante, como un divorcio o la muerte de un ser amado.
Una persona puede temer la pérdida de su esposa, de sus padres, de sus hijos, de sus parientes, de sus amigos, o de cualquiera que esté cerca de su corazón. Este temor puede ser causado por varios factores, como:
1. ” Divorcio o separación: Cuando se sufre la experiencia de un divorcio o una separación puede ser presa de un proceso de ansiedad debido al estrés ocasionado por ese procesos de transición; por la mente de estas personas pasan infinidad de pensamientos que producen emociones desbastadoras. Aparecen preguntas sin respuestas y una gran frustración silenciosa.
2. ” El síndrome del nido vacío: Una madre que ha estado entregada al hogar puede tener tendencia a la depresión, al darse cuenta de que sus hijos están creciendo y haciéndose cada vez más independientes. Esta circunstancia psicológica tiene su origen en los pensamientos e ideas que han dado una manera de vivir que por varios años ella era necesaria para sus hijos, y ahora ellos pueden manejarse sin ella, y en consecuencia pronto no la necesitarán. Una madre que ha experimentado este temor de perder a sus hijos debería intentar tener una vida social más activa, si sólo se ha dedicado al hogar, le sería muy saludable que buscara un empleo o practicara algún hobby que le permita estar ocupada. La sensación de inutilidad es natural, pero debes crear la manera de combatir este temor haciéndote útil en algunas otras maneras. Además, sería extraordinario, aprender a ver estas situaciones de otro punto de vista: Aceptando el hecho de que has educado tan bien a tus hijos que ahora ellos están listos para vivir sus propias vidas. Ahora, es tiempo de que ellos caminen solos, sin la ayuda de mamá.
3. ” Muerte en la familia: una muerte en la familia o en tu círculo de amigos siempre nos hará pensar en lo fugaz que puede ser la vida. Esta comprensión, a veces excesivamente cruda, se manifestará en forma de miedo a perder a alguien amado a raíz de una enfermedad o muerte repentina. La muerte es inevitable y por eso es muy saludable dar tiempo de calidad gente que amas
El temor de perder a una persona amada siempre persiste. Uno nunca puede escaparse de este miedo porque existirán situaciones en la que deberemos pensar en la posibilidad de separarnos definitivamente de la gente que amamos. La posibilidad de perder a un ser querido es uno de los factores ciertos de esta vida, y nadie puede evitarlo.
Este miedo al igual que los planteados en las entregas anteriores son inevitables, están ahí en mundo silencioso de nuestro pensamiento, aún que algunas veces lo perturban y demás. El hecho de que sean inevitables nos lleva a desarrollar maneras, estrategias que nos permitan mantener el control y sobrellevar amable y productivamente nuestra vida. La vida es muy hermosa y es un desperdicio vivirla con el sello de injusto de estos miedos. De cómo mantener el control sobre cada uno de estos miedos, hablaremos en las próximas entregas, por ahora es todo y cuánto y como siempre, ya lo sabe: “NOS VEMOS EN LAS CUMBRES” .
Atte.
H. Martín Marruffo T.
Especialista en desarrollo organizacional, programación neurolingüística, facilitador y asesor de empresa nacionales y extranjeras. Creador de poderosos eventos de integración empresarial: Team Building. Las Herramientas mas Poderosas de Capacitación y del Seminario Caminando Sobre las Brasas. Encuentro con el Gigante. Director de Asesoria Integral Especializada.
