El próximo 29 de septiembre se celebra el “Día Mundial del Corazón” auspiciado por la Federación Mundial del Corazón, la Organización Mundial de la Salud, las sociedades médicas y los ministerios de salud que en el caso de México es la Secretaría de Salud y la Sociedad Mexicana de Cardiología.

La finalidad de esta celebración es crear conciencia de la importancia que tiene el cuidado y bienestar del corazón para una vida sana, en general del sistema vascular, porque el corazón no es el único afectado por las enfermedades de este sistema, otro órgano es el cerebro y en general los vasos sanguíneos. El lema de este año es “Da poder a tu vida”.

Las enfermedades vasculares continúan ocupando el primer lugar en enfermedades y muertes en el mundo. Una de cada tres personas que mueren, es por esta causa. En México se presentaron en el último año 21,427 defunciones por enfermedad vascular. Las principales afecciones son el infarto de miocardio (casi 6 millones en México por año]), las enfermedades cerebrovasculares (apoplejía) y las vasculopatías periféricas.

De las afecciones del corazón están también los eventos que llevan a lo que se llama “muerte súbita”, que es aquella muerte “natural”, que ocurre de manera inesperada y rápida en menos de una hora de haber empezado los síntomas cardiovasculares y que representa la tercera parte de las muertes de origen cardiaco. Es originada cuando ocurren alteraciones eléctricas del corazón que hacen que el bombeo de sangre sea ineficaz, originando una baja presión tal, que ya no llega sangre y por tanto oxígeno a los órganos del cuerpo, ocasionando la muerte súbita. Dentro de los trastornos que la originan está la frecuencia de latidos muy alta por estímulo ventricular (taquicardia ventricular) y otros trastornos como la fibrilación ventricular.

Dentro de los principales riesgos de enfermar del corazón está: concentraciones altas de colesterol, incluido el llamado colesterol “malo” (LDL) y las concentraciones bajas de colesterol “bueno”(HDL); la presión arterial alta; el tabaquismo; el sobrepeso y la obesidad, la inactividad física, el antecedente familiar de enfermedad coronaria y el ser mayor de edad o de edad avanzada.

Las medidas preventivas están dirigidas a disminuir en todo posible los riesgos como: la alimentación adecuada. Con altos índices de obesidad, se necesita revertir la tendencia a alimentarse con refrescos ricos en azúcares, comida rápida rica en grasa saturada, azúcares y sal, por alimentos caseros ricos en verduras, frutas y otros productos menos dañinos.

Revertir el sedentarismo que nos ha invadido con ejercicio regular; con estas dos medidas se combate la obesidad. En esencia se trata de un cambio en el estilo de vida para abatir estos problemas. Solo en nuestro estado se reporta hasta la semana 36 de este año, 16069 casos nuevos de hipertensión arterial, 9996 de diabetes II, 3604 casos de enfermedad isquémica del corazón y 1563 de enfermedad cerebrovascular.

Es además necesario el control médico, periódico, de estas enfermedades y la toma de medicamentos, que reducen considerablemente las complicaciones y la muerte.

La Sociedad Interamericana de Cardiología ha conformado una “Alianza contra la Muerte Súbita Cardiaca” en donde se pretende involucrar a especialistas, sociedad civil, personal de salud, muy especial a personal paramédico, a difundir y multiplicar los conocimientos de reanimación cardiopulmonar en la población, que son indispensables para revertir un paro cardiaco y para que siendo testigos de un evento de esta naturaleza demos esta reanimación sin esperar a que lleguen los servicios médicos, de esta manera incrementar la oportunidad de vivir. Otra propuesta de esta alianza es adquirir desfibriladores externos automáticos (DEA) para espacios públicos de gran concurrencia como escuelas, centros comerciales, gimnasios, oficinas, unidades habitacionales y otros espacios y desde luego los servicios paramédicos y ambulancias. Se considera que con una reanimación cardiopulmonar oportuna y uso de un desfibrilador aumenta la oportunidad de salvar vidas en un 60%.

Las instituciones de salud de nuestro país toda la semana bridaran información y servicios al respecto, concerniente a dietas, ejercicios, cursos, detecciones, charlas, pláticas para inducirnos a un mejor estilo de vida. Hagamos caso y busquemos esta información y cambiemos nuestro estilo de vivir.

Bibliografía

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